Home CubaLa Crisis de Salud en Cuba: El Azote del Dengue y la Hepatitis en un Contexto Social Crítico

La Crisis de Salud en Cuba: El Azote del Dengue y la Hepatitis en un Contexto Social Crítico

by Luna Lianet
0 comments 2 views
A+A-
Reset
dengue

El sistema de salud de Cuba, alguna vez aclamado por su alcance y eficiencia, se enfrenta hoy a un escenario de profundo deterioro. En medio de una crisis multifacética que afecta cada aspecto de la vida diaria en la isla, la aparición y propagación de brotes de enfermedades infecciosas como el dengue, el oropouche y la hepatitis A han expuesto las grietas de una infraestructura sanitaria que parece estar al borde del colapso. Esta situación no es un problema aislado, sino un reflejo directo de una profunda crisis social que se manifiesta en la escasez de alimentos, la falta de medicamentos y el deterioro de los servicios básicos.

El Panorama Epidemiológico Actual

Las alarmas se han encendido en varias provincias cubanas. Las autoridades de salud han confirmado la transmisión activa del dengue en al menos siete provincias, una enfermedad viral transmitida por mosquitos que puede causar fiebre alta, dolores de cabeza severos y, en casos graves, una peligrosa fiebre hemorrágica. Paralelamente, el virus oropouche se ha extendido a once provincias, y los casos de hepatitis A están en aumento. Esta combinación de brotes simultáneos crea una carga sin precedentes para un sistema de salud ya sobrecargado.

El doctor Francisco Durán, director nacional de Epidemiología, ha reconocido públicamente la situación, pero la percepción de la población es que las cifras oficiales no reflejan la magnitud real del problema. Los hospitales y policlínicos se reportan saturados de pacientes con síntomas febriles, y la confusión entre los ciudadanos es palpable, pues muchos no pueden distinguir entre los diferentes virus. La falta de acceso a diagnósticos rápidos y fiables agrava la incertidumbre y dificulta la respuesta efectiva.

Los Virus: Dengue y Hepatitis, una Amenaza Constante

El dengue es una vieja conocida en la isla, pero su resurgimiento con fuerza es un indicador preocupante de la falta de control sobre el mosquito Aedes aegypti. Las campañas de fumigación, antes una práctica regular y rigurosa, se han vuelto esporádicas e ineficientes debido a la escasez de combustible y los insumos necesarios. Esto permite que el vector del virus se reproduzca sin control en las zonas urbanas y rurales.

Por su parte, la hepatitis A, como señala el médico opositor Eduardo Cardet, es una enfermedad asociada directamente con la pobreza y el deterioro de las condiciones higiénico-sanitarias. Se transmite a través de agua o alimentos contaminados. La escasez de agua potable, la interrupción del servicio eléctrico que afecta la refrigeración y la falta de jabón y desinfectantes en los hogares contribuyen a su propagación. La recomendación de hervir o clorar el agua, mientras es técnicamente correcta, es una solución inalcanzable para muchos cubanos que carecen de los medios o el acceso a estos recursos básicos.

La Raíz del Problema: Conexión con la Crisis Social

No se puede entender la crisis sanitaria sin abordar la profunda crisis social y económica que vive Cuba. La acumulación de basura en las calles es un problema generalizado. Los camiones de recogida no circulan con regularidad, y los vertederos improvisados se convierten en focos de infestación para los mosquitos y roedores. Esta situación es una consecuencia directa de la crisis energética y de la falta de recursos para mantener servicios esenciales.

Además, la escasez de medicamentos es uno de los mayores dramas. Los ciudadanos con síntomas de dengue o hepatitis no encuentran ni siquiera paracetamol o suero rehidratante en las farmacias estatales. Esto obliga a las personas a depender del mercado negro, donde los precios son exorbitantes, o de la ayuda de familiares en el extranjero. La autogestión de la salud se ha vuelto una necesidad, pero con recursos muy limitados.

dengue
La Crisis de Salud en Cuba: El Azote del Dengue y la Hepatitis en un Contexto Social Crítico 7

La Infraestructura de Salud en Colapso

La otrora robusta red de hospitales y consultorios médicos está sufriendo un severo deterioro. La falta de mantenimiento, la obsolescencia de los equipos médicos y el éxodo masivo de personal de la salud, que busca mejores condiciones de vida y de trabajo en otros países, han debilitado considerablemente la capacidad de respuesta del sistema. Las salas de emergencia están desbordadas, y la atención médica de calidad se ha convertido en un lujo para unos pocos.

Un ejemplo palpable de esta situación es la dificultad para realizar análisis de laboratorio. Para confirmar casos de dengue o hepatitis A, se requieren kits de diagnóstico que simplemente no están disponibles en la mayoría de las instalaciones. Esto genera subregistros y una falta de datos precisos que impiden una respuesta epidemiológica efectiva a nivel nacional.

El Impacto en la Población: Testimonios y Realidades

La realidad de la crisis se vive en las calles. Familias enteras se enferman, con niños y ancianos como los más vulnerables. Las madres relatan la desesperación de no poder encontrar medicamentos para bajar la fiebre de sus hijos. La situación ha generado una sensación de abandono y desprotección. No se trata solo de la enfermedad, sino del miedo constante a enfermarse sin tener los medios para recibir un tratamiento adecuado.

La embajada de Estados Unidos en Cuba, consciente de la gravedad del problema, ha emitido una alerta sanitaria para sus ciudadanos que viajan a la isla, recomendando precauciones para evitar las picaduras de mosquitos. Esta advertencia de una entidad externa subraya la seriedad de la situación y la incapacidad percibida del gobierno cubano para garantizar un entorno seguro y saludable.

Respuesta Oficial vs. Percepción Ciudadana

Mientras las autoridades hacen llamados a la población para que colabore en las labores de limpieza y prevención, los ciudadanos denuncian que las soluciones reales, como la fumigación masiva y el acceso a medicamentos, no llegan. La comunicación oficial es vista con escepticismo, y la falta de transparencia sobre el número de casos y fallecimientos alimenta la desconfianza. La población siente que está sola en la lucha contra estos virus, en un contexto donde el estado parece más preocupado por mantener la narrativa de control que por la salud de sus habitantes.

En resumen, la actual situación sanitaria en Cuba es el resultado de una convergencia de factores: la proliferación de enfermedades infecciosas, el colapso de la infraestructura de salud y el agravamiento de una crisis económica y social. El dengue y la hepatitis no son solo virus, sino síntomas de un malestar más profundo que amenaza la estabilidad y el bienestar de la sociedad cubana en su conjunto.

¿Por qué se están propagando estas enfermedades?

La propagación se debe a una combinación de factores, como la acumulación de basura en las calles, la falta de fumigación regular para controlar mosquitos y las malas condiciones higiénico-sanitarias, exacerbadas por la crisis económica del país.

¿Qué impacto tiene la crisis en la población?

Los cubanos enfrentan una severa escasez de medicamentos básicos, como paracetamol, lo que dificulta el tratamiento de los síntomas. La falta de insumos médicos y el deterioro de los hospitales hacen que la población se sienta desprotegida ante las enfermedades.

You may also like

Leave a Comment

This website uses cookies to improve your experience. We'll assume you're ok with this, but you can opt-out if you wish. Accept Read More