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Investigación de este 2023 muestra una técnica para ayudar a quienes tienen conductas repetitivas centradas en el cuerpo
Morderse las uñas de forma compulsiva, pellizcarse la piel, arrancarse el pelo o morderse los labios y las mejillas, son algunos de los comportamientos repetitivos centrados en el cuerpo que pueden convertirse en una fuente de angustia, pero una nueva investigación puede ofrecer esperanzas de alivio.
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¿Qué son las conductas repetitivas?
Las conductas repetitivas centradas en el cuerpo, son un conjunto de trastornos clasificados por rutinas de cuidado personal que esencialmente salen mal. Estos incluyen jalar, recoger, morder el cabello, o rascarse la piel o las uñas. Estos trastornos incluyen la tricotilomanía (jalar compulsivamente el cabello), la dermatilomanía (pellizcarse la piel de forma compulsiva, también llamada trastorno de excoriación) y la onicofagia (morderse las uñas compulsivamente)
¿Qué aborda la investigación ?
Aunque muchas personas pueden tener uno de estos hábitos en una forma menor, para un número más pequeño pero aún significativo de personas el comportamiento puede causar daños visibles en la piel, como parches de calvicie, cicatrices, llagas y lesiones, y afectar su salud mental, dijo Steffen Moritz, jefe de Neuropsicología Clínica en el departamento de Psiquiatría y Psicoterapia en el Centro Médico Universitario Hamburg-Eppendorf en Alemania.
«En realidad, la mayoría de la gente muestra alguno de estos hábitos a lo largo de su vida, sobre todo morderse las uñas, hasta cierto punto, pero todos pueden llegar a ser problemáticos cuando se hacen en exceso», afirma Moritz, quien solía morderse las uñas.
«Y muchas de estas personas también tienen problemas (coexistentes), a menudo como consecuencia, porque se avergüenzan de su comportamiento», dijo. «Evitan la intimidad, sobre todo en la tricotilomanía (arrancarse el vello corporal) o en pellizcarse la piel, y evitan quitarse la ropa delante de su pareja, por ejemplo».
Aunque a menudo se perciben erróneamente como leves, estos comportamientos repetitivos en algunos casos extremos pueden llegar a ser potencialmente mortales. Los casos de sepsis, una reacción grave a una infección, se han relacionado con el pellizcarse la piel. Y arrancarse el pelo y comérselo han provocado graves problemas estomacales con complicaciones mortales.
Acerca de la técnica para ayudar con las conductas repetitivas
Las conductas repetitivas, a menudo envueltos en vergüenza y secretismo, no deben considerarse una forma de automutilación, autolesión u odio hacia uno mismo, afirma Moritz. Se entienden más bien como una forma de calmar y tranquilizar el sistema nervioso, sobre todo en situaciones de estrés, para aliviar el aburrimiento o para descargar emociones fuertes como la ira.
La técnica de sustitución del hábito que idearon Moritz y sus colegas consiste en acariciar suavemente la piel de distintas maneras: haciendo círculos con los dedos índice y medio, golpeando los dedos índice y medio contra el pulgar, cruzando los brazos y acariciando los antebrazos, haciendo círculos con las yemas de los dedos sobre la palma de la otra mano, entre otras. Si te preocupa especialmente rascarte la piel, puedes hacerlo sobre tu ropa en lugar de tocar directamente el cuerpo.